KARL MARX: EL MATERIALISMO HISTÓRICO.
En tiempos de Karl Marx la pobreza se extendía por todas partes y numerosos sectores de la sociedad vivían en la miseria y en la indigencia. Marx no era indiferente a esta situación tan injusta pero lo que a él le preocupaba no era tanto las diferencias que se daban en la sociedad entre ricos y pobres sino algo más profundo y radical: la emancipación del ser humano, a partir de la clase trabajadora a la que le había tocado en la sociedad capitalista el papel de explotada frente a la clase detentadora del poder económico y las fuerzas productivas- las riquezas naturales,el conocimiento y la técnica-, sin olvidar los medios de producción. Veía como el trabajador había enajenado su existencia, no era dueño de su propio destino, su vida dependía del amo y no podía disponer libremente, por tanto, de los medios de producción que él mismo utlizaba para enriquecer a otros.Se había convertido en mercancia y su valor y dignidad no era mayor que el de las cosas-cosificación-.
Marx traza un esquema histórico de la evolución de la humanidad y las clases, para verificar cómo se había llegado a esta situación: la sociedad antigua y esclavista, que conoció la tensión y liberación del esclavo frente al amo. La época feudal de los señores que dominaban a los siervos y el posterior control de la los señores feudales por los monarcas. Con visión revolucionaria emerge la burguesía, en torno a la Revolución Francesa, que llega a nuestros día detentando el poder político y económico. En el momento histórico que le tocó vivir, nuestro filósofo y economista piensa que es el proletariado el que está destinado a realizar el proceso revolucionario definitivo. Si bien había sido necesario el acceso de la burguesía al poder, ahora era el momento de comenzar el proceso de liberación de los pobres parias de la tierra, históricamente sojuzgados y explotados.
En este proceso revolucionario, se daría un primer paso: arrebatar los grandes medios de producción a los capitalistas, su poder económico y político,instaurando la dictadura del proletario, como fuerza y autoridad en la transición al nuevo orden social y económico-el socialismo-en el que el Estado administraría equitativamente los medios de producción para llegar finalmente a una sociedad sin clases, en la que no habría explotadores y explotados, en plena igualdad económica y social-el comunismo-.
Marx piensa que los cambios en la sociedad no se producen por una voluntad divina o la buena voluntad de los individuos aislados, sino por la presión que las estructuras económicas ejercen sobre los explotados que terminarán por enfrentarse a aquellos que no quieren perder su posición privilegiada en la sociedad. Es un problema económico, no teológico, porque las relaciones sociales dependen de quienes detentan los medios de producción, y si estos dueños son una minoría, caracterizarán tales relaciones como dominación y explotación de la mayoría.